¡¡"DULCE" GENIO!! HOMENAJE A CHAPLIN Y A CHARLOT




  La florista es una chica ciega y pobre que vende flores en la calle hasta que un día, (por aquello del azar...), conoce a un "rico y apuesto magnate" que la ayuda a recobrar la vista y a vender en una elegante floristería. Una vez recuperada la visión, su príncipe desaparece misteriosamente.  

Y pensar que Chaplin en su infancia fue prácticamente un vagabundo... Increíble la vida de este hombre echo a sí mismo que habiendo crecido en la más mísera pobreza, económica y emocional, (de niño se ganaba la vida actuando en los bares), llegó a ser el director más influyente y reconocido del Hollywood del primer decalustro del siglo XX. Con razón era capaz de crear escenas tan emotivas...  Debió vivir,  desde muy joven, muchos de los sentimientos que marcan de por vida. Me pregunto qué trató de transmitir ideando este entreñable y humanísimo personaje... ¿sensibilizar al mundo?, ¿darle una lección?; ¿una crítica a la sociedad de consumo? ¿Deseaba Chaplin, en el fondo de su alma de niño abandonado, obtener la paz mental de su personaje...?

Charlot es un antihéroe admirable, un ideal de generosidad imposible de alcanzar sin volverte loco, está por encima de las ambiciones y el ego de este mundo. Él vive en paz con lo poco que la vida le otorga; se adapta a todo sin perder su conciencia y sus valores y, en cierto modo, permitiéndose cierto grado de satisfacción y orgullo. Como si no existiera nada más importante en este mundo que amar amar y amar.

Realmente, en el fondo, quién pudiera ser como Charlot... Sabio conocedor de los anhelos más ocultos del alma humana este Chaplin. Un auténtico genio y filósofo.