¡ALMA ALMITA LINDAAA!

Filosofías de la vida

¡Vale! y muchos diréis que el alma es algo incorpóreo que sólo podemos imaginar ni tenemos porque sentir. Y llevareis razón, no podríamos medirla desde una perspectiva humana (tiene bastante que ver con la charla de tribus caníbales que publicaré por Internet dentro de poco). En lo que sí que estaremos de acuerdo es en que es lo que pone nuestro cuerpo y órganos en funcionamiento; sería el viento que hace girar el molino, que sin astas (el cuerpo) no puede girar. Pero por eso mismo, no nos puede pertenecer como el viento no es del molino; en todo caso es girado por ese viento y no por otro, en ese momento.
Ese viento, no otro... Lo mismo creo que ocurre con todos los cuerpos vivientes. Somos movidos por una única energía llamada VIDA que todos compartimos, aunque cada uno tenga su cacho; llamémosla por aproximarnos a Platón ¡LA SUYA PROPIA! ¡Pero no por eso diremos que es dueño de la vida en su totalidad! Es decir; de la ENERGÍA , de esa ALMA que es común al ser lo mismo que la VIDA.

Esa energía que hace vivir a los seres vivos y que no puede ser la misma que la de los inertes es El Alma o Vida. Y es inmaterial insensible (porque no tiene sentidos estando sola) y por lo tanto ilimitada y eterna (hasta cierto punto).

No podemos ser nosotros ¡de ninguna manera! porque sin nosotros no tiene ni identidad, ni Historia (sin nosotros)... Pero nosotros no podemos ser sin ELLA porque son las pilas de "nuestra maquinaria", que en realidad es más nosotros que la mismita... ¡Somos la Unión!, una vez se separan dejamos de ser, la diferencia está en que esa energía nuestra nunca desaparecerá mientras el cuerpo sí; pero no somos, ya nosotros...

Y si a cada nacimiento ¡un alma nueva! ¿entonces dónde quedaría eso de su eternidad...?. ¡Encima sería decir que la Tierra ahora está más cargada de almas/vidas/energía que hace millones de años...! (un poco injusto e irreal ¿no?).

Lo que sí se puede contar es el cuerpo y si he dicho antes que somos más Cuerpo que Alma es porque nos marca más; gracias a él: envejecemos, sentimos... ¡y hasta morimos! ¡Que no sé qué tanta manía con rebajarlo ¡con lo majísmosss que son algunos cuerpos, jejeje!; muere como nosotros, ¡nos distingue de los otros...! Y hace que seamos RECORDADOS ¡que la inmortalidad nunca se puede echar de menos...! 01/02/2008

¡Bye bye! ;-)